Caso Aton: ordenaron que el imputado realice tareas comunitarias en el Refugio Canino y done balanceado

En el año 2020, el perro fue atacado en la vía pública mediante un disparo con rifle de aire comprimido, que impactó en su columna vertebral.

El viernes pasado, se desarrolló en el Poder Judicial de nuestra ciudad, la audiencia de suspensión de juicio a prueba por el caso Aton. La suspensión del juicio a prueba, también conocida como “Probation” es una forma de extinción de la acción penal respecto del imputado que cumplió determinadas reglas de conducta durante un período de prueba fijado por el tribunal que la concedió, siempre que se reúnan los recaudos legalmente establecidos.

En la oportunidad, fue citado el imputado Darío Rubén Capoano, por supuesto autor de infracción a la Ley 14.346, en su artículo 3 (serán considerados actos de crueldad) inciso 7 (Lastimar y arrollar animales intencionalmente, causarles torturas o sufrimientos innecesarios o matarlos por solo espíritu de perversidad).

Recordemos que el 8 de junio de 2020, alrededor de las 12:15 AM, el perro llamado Aton fue atacado en la vía pública. Le dispararon con un rifle de aire comprimido calibre 5.5 milímetros marca Stoeger impactando en su columna vertebral. Lo cual le provocó una lesión perforante en la zona dorsal ocasionándole trauma medular agudo con consecuencias graves para la función motora de sus miembros posteriores.

Al día siguiente, el 9 de junio de 2020 a las 18:00 horas, la Policía allanó el inmueble donde vive el imputado arrojando el procedimiento resultado positivo. En el interior del lugar se secuestró el rifle de aire comprimido marca Stoeger calibre 5.5 milímetros, que se encontraba debajo de la cama, junto a una caja de 100 balines, que contenía 60 unidades.

Según lo determinó la Justicia, Capoano deberá realizar tareas comunitarias en el Refugio Canino Municipal Matías Bruno, que serán supervisadas por la encargada y por un integrante de la ONG animalista, Corazón de Trapo. Además, tendrá que comprar 10 bolsas de balanceado de buena calidad de 15 kg cada una, que deberá entregar a la mencionada asociación civil. También deberá participar de talleres de educación, concientización y sensibilización hacía los animales no humanos en el lapso de un mes.

Desde Corazón de Trapo compartieron la información y expresaron su agradecimiento a las letradas María Belén Medrano y Gretel Monserrat, del Colegio de Abogados Animalista de San Francisco, “quienes trabajan en conjunto desde la Fundación BioAnimalis ONG con nuestra asociación civil”.

Por su parte, hicieron extensivo el agradecimiento “al médico veterinario Roberto Ferrero de la ciudad de San Francisco que, tras seis horas de cirugía, pudo extraer el proyectil de la columna de Aton y a los veterinarios Walter Folco, por estabilizarlo y cuidarlo hasta su traslado, y Sara Reta, que le realizaba los tratamientos para calmar su dolor y lo tuvo en guardería unos meses”.

Desde Corazón de Trapo destacaron “el gran accionar de los jóvenes de nuestra ciudad que lo paseaban con mucho amor y cuidados en su carrito para alegrar sus días tristes”.

Y agregaron que “Aton era un perro comunitario muy querido por las personas. Finalmente fue adoptado por Judhit Frutos y su hijo Valentín, que lo amaron y cuidaron hasta los últimos días de su vida”.  Aton falleció, a causa de las secuelas del ataque sufrido, en el mes de abril de este año.

Por último, remarcaron: “¡En tu nombre será justicia, Aton querido, y en nombre de todos los animales que sufren a causa de la humanidad! Mientras ellos no tengan voz, no dejarán de escuchar la nuestra”.