La Aldena abrió su cafetería en la emblemática esquina de San Martín y Sarmiento

José Luis Bassano, Rosana Camandona y sus hijos conforman una familia emprendedora por excelencia, que siempre piensa en sus fieles clientes.

La familia constituida por José Luis Bassano, Rosana Camandona y sus hijos llegó a Arroyito en febrero de 2001, a meses de que se desatara la crisis económica que tuvo su punto álgido con la renuncia del presidente De La Rúa.

Con el ímpetu que los caracteriza abrieron, en el corazón de la localidad, las puertas del comercio que ya es una tradición de sabores inconfundibles, La Aldena.

Hoy, con el país sumido en otra crisis que golpea a todo el territorio nacional, y de la que nuestra ciudad no es ajena, decidieron expandirse pensando en sus clientes, motores de su crecimiento ininterrumpido.

Es que desde su mudanza al edificio de San Martín 287, habían utilizado la intersección de esa calle y Sarmiento –donde funcionaron años atrás- como depósito. Allí coexistían la heladería con la cafetería, casi siempre a salón lleno.

Hace tiempo, a esta familia emprendedora se le ocurrió la idea de que debían ampliarse las instalaciones dividiendo los rubros, para mayor comodidad de quienes asisten, ya sea a tomarse el clásico helado artesanal que elaboran, como para disfrutar de un café.

Por ello reacondicionaron el emblemático inmueble de esa esquina tan protagonista del centro de la ciudad y lo ambientaron con muebles antiguos, vajillas de porcelana y murales de gran tamaño. La fusión de lo clásico y lo moderno crea un microclima que invita a quedarse.

La Aldeana, ahora cuenta con dos sectores para el disfrute de quienes la eligen, desde hace 18 años, por la calidad de los productos que ofrece y por esa sensación de hogar que se experimenta en cada uno de sus espacios.